Seleccionamos las mejores tapicerías para “vestir” nuestros sofás, realizados por los proveedores más importantes, para que representen la síntesis ideal entre la calidad y el estilo moderno y puedan ser mullidos y prácticos al mismo tiempo. La microfibra es un tipo de tejido sintético obtenido con un hilado muy denso especialmente resistente al desgaste y a los desgarros, haciendo la tapicería tanto práctica como elegante.
ADVERTENCIAS
- Colocar el sofá al menos a 50 cm de las fuentes de calor, como estufas o radiadores.
- Para garantizar el mantenimiento del color de la tapicería, evitar la exposición del sofá a la luz directa o a lámparas potentes.
- Para limpiar el polvo, cepillar delicadamente con un cepillo de cerdas suaves o una aspiradora a media potencia, utilizando el accesorio más adecuado en dotación y teniendo cuidado de no frotar el accesorio directamente contra la tapicería.
- Para mantener la apariencia estética, es recomendable tratar cada mancha inmediatamente, antes de que se absorba demasiado. Esto evitará tener que utilizar tratamientos prolongados o abrasivos.
- Si se hace necesario usar disolventes, evitar aplicarlos directamente en la mancha. Echar el disolvente en un paño limpio. Cada tratamiento se debería testar primero en una zona escondida de la tapicería del sofá.
- Limpiar la mancha con un movimiento circular que vaya desde el exterior hacia el interior.
- Procurar siempre frotar cada mancha con cuidado.
- Si compra un sofá nuevo, con una tapicería idéntica por artículo y/o color a uno que ya posee, es posible que pueda notar ligeras diferencias del tono de color entre ambos.
- Proceda semanalmente a un cepillado o aspirado para evitar la acumulación de polvo.
- Limpieza únicamente en seco en tintorerias especializadas.
- Tener en cuenta que la limpieza a seco de solo una parte puede producir pequeñas variaciones de color.
- Las fuentes de calor intenso (calefacción, luz, sol, etc) pueden dañar los tejidos.
LIMPIEZA
Para quitar las manchas de las tapicerías de microfibra, en función del tipo de mancha, seguir las siguientes instrucciones:
- LICORES: Absorber con papel o con un paño blanco no abrasivo y después quitar la mancha. Si la mancha persiste, lavar utilizando sólo espuma de jabón neutro sin color obtenida agitando fuertemente el recipiente. Después quitar la mancha utilizando sólo alcohol desnaturalizado diluido en agua al 10%. Secar inmediatamente con aire caliente utilizando un secador. Dirigir el chorro de aire caliente desde fuera hacia dentro de la zona húmeda.
- BEBIDAS/VINO: Absorber con papel o con un paño blanco no abrasivo y después quitar la mancha. Si la mancha persiste, quitar la mancha utilizando sólo una solución de una parte de vinagre con una parte de agua. Después lavar utilizando sólo espuma de jabón neutro incoloro, obtenida agitando fuertemente el recipiente. Por último, absorber la espuma de jabón con un paño humedecido con agua. Secar inmediatamente con aire caliente utilizando un secador. Dirigir el chorro de aire caliente desde fuera hacia dentro de la zona húmeda.
- CAFÉ/TÉ: Absorber con papel o con un paño blanco no abrasivo y después quitar la mancha. Si la mancha persiste, lavar utilizando sólo espuma de jabón neutro sin color, obtenida agitando fuertemente el recipiente. Después quitar la mancha utilizando sólo amoniaco diluido en agua al 10%. Secar inmediatamente con aire caliente utilizando un secador. Dirigir el chorro de aire caliente desde fuera hacia dentro de la zona húmeda.
- CERVEZA: Absorber con papel o con un paño blanco no abrasivo y después quitar la mancha. Si la mancha persiste, quitarla utilizando sólo agua caliente (máx 40°C / 104°F) diluida con un 3% de alcohol desnaturalizado en agua. Secar inmediatamente con aire caliente utilizando un secador. Dirigir el chorro de aire caliente desde fuera hacia dentro de la zona húmeda.
- ACEITE: Absorber con papel o con un paño blanco no abrasivo y después quitar la mancha. Lavar utilizando sólo espuma de jabón neutro sin color, obtenida agitando fuertemente el recipiente. Absorber lo más posible la mancha utilizando papel absorbente. Si la mancha persiste, quitarla con un paño blanco y no abrasivo humedecido sólo con percloroetileno. Absorber lo más posible la mancha con papel absorbente. Secar inmediatamente con aire caliente utilizando un secador. Dirigir el chorro de aire caliente desde fuera hacia dentro de la zona húmeda.